Cohete chino fuera de control caerá a Tierra mañana y podría impactar en Sudamérica

Una actualización de último momento, a cargo de la Aerospace Corporation, estima que la ventana de tiempo para el reingreso a la atmósfera terrestre de un cohete chino fuera de control, iniciará a partir del sábado 30 de julio a la 14:24, hora de México, aunque destaca que existe un margen adicional de hasta siete horas para que esto suceda.

Una amenaza a la seguridad aérea

El cohete Long March 5B partió el pasado 24 de julio desde China, transportando un nuevo módulo para la estación espacial Tiangong, pero su propulsor quedó fuera de control y se espera que reingrese a la atmósfera terrestre atravesando múltiples regiones pobladas en Sudamérica, amenazando la seguridad aérea y la integridad de personas y bienes materiales.

Según el anuncio de la Aerospace Corporation, especializada en el análisis de las trayectorias de los vehículos grandes construidos por humanos que caen a la Tierra, se estima que la ventana de tiempo para que los restos del cohete reingresen a la Tierra se abre a partir de las 14:24, hora de México, del día sábado 30 de julio, aunque esto podría ocurrir hasta siete horas más tarde.

Sudamérica, probable zona de impacto

En la predicción de la Aerospace Corporation, también se detalla que algunas de las posibles trayectorias para los restos del cohete chino incluyen territorio estadounidense, mexicano, especialmente zonas costeras, y Sudamérica en general, con chance en algunas provincias de Argentina.

En términos generales, no es común que estos reingresos descontrolados ocurran, al menos no con objetos de semejante tamaño: normalmente, los propulsores de los cohetes no se diseñan para llegar a la órbita, y en cambio se planifica la trayectoria de reingreso para garantizar que suceda en zonas seguras, como el océano.

El problema del cohete chino

En esta ocasión, el propulsor del cohete chino sí alcanzó la órbita terrestre, por lo que resulta imposible poder controlar su reingreso, y se espera que, por regla general, entre el 20 y el 40 por ciento de su masa sobreviva al reingreso e impacte contra la superficie planetaria, aunque no es posible saber con exactitud qué tamaño tendrá cuando esto suceda.

Las estimaciones indican que probablemente no se desintegren tanques pequeños y medianos, así como componentes del motor, lo que representa entre 5 y 9 toneladas métricas, muy poco en comparación a los tanques grandes y las cubiertas de la etapa central, que probablemente sí se desintegren.